Próxima tertulia: La hoja roja

Ya sé que echabais de menos una nueva entrada que comentara todos los acontecimientos literarios que nos han ido saliendo al paso estos últimos días. Sólo estaba esperando a tener las fotos de la presentación de Mira si yo te querré en la Fnac, pero ya las pondré a posteriori, para que no os impacientéis.
La tertulia de Carreteras secundarias se celebró el pasado miércoles con el acostumbrado éxito de público (cada vez se nos une más gente de fuera del instituto, hecho que siempre nos colma de satisfacción; dentro de poco vamos a tener que trasladarnos al salón de actos). Como era de esperar, fueron insuperables tanto la introducción como los bombones de nuestra Madre Fundadora, que dieron paso a opiniones de lo más variopinto, aunque sin llegar a los extremos de amor y odio que despertó Pasavento. Y yo me pregunto: ¿eso es bueno o malo? ¿Habrá que invitar a la viperina María Patiño para que radicalice a grito pelado las posturas a favor o en contra del libro “tertuliado”? Dejo en el aire la pregunta, al tiempo que os desaconsejo vivamente que veáis la peli que se basó en la novela: si ya la habéis leído, os parecerá un resumen apresurado y soso del texto (todo el sentido del humor de Martínez de Pisón se esfuma como por arte de magia), y si aún no habéis leído la novela os quitará por completo las ganas de hacerlo.
La presentación de Mira si yo te querré en la Fnac fue un acontecimiento casi a la altura de la cholesterol party (también conocida como “parrillada manchega”), aunque, a diferencia de ésta, aquí no había nada de picar... Pero mejor, porque con el estómago vacío atendimos más a la brillante introducción de Mar Langa (¿pero no era Leonor Watling?) y a las siempre inspiradas palabras de nuestro Alfaguaro, que nos dejó a todos con ganas de viajar al Sahara. Al día siguiente (viernes) presentaba el libro en Novelda en compañía del ex-legionario que lo acompañó en su segunda visita a los campamentos saharauis, y aunque no sabemos cómo resultó la cosa, suponemos que sería otro éxito.
También el viernes nuestra Madre Fundadora presentaba a la escritora Espido Freire, y agradeceríamos un comentario-crónica del evento para los que no pudimos ir.
Por último, antes de acabar esta entrada, recordad que el libro de la próxima tertulia será La hoja roja, de Miguel Delibes. La fecha creo que es el primer jueves de junio, día 7, si no surge nada que lo impida.
En breve adornaré esta entrada con fotos, no os preocupéis.

P.S: Como veréis, ya he podido "colgar" las fotos de ambas presentaciones. ¡Qué jóvenes y guapos son todos los lectores de Alfaguaro!¿verdad?

Mira si yo te leeré

Cuando ya casi todos estamos de vuelta (y algunos de vuelta y media) de nuestros respectivos periplos a lo largo y ancho de este mundo, me doy cuenta de que, en esencia, el denominador común de todos estos viajes viene a ser la literatura, así que sí está justificado que las crónicas de nuestros ires y venires se incluyan en este blog pretendidamente literario: véase, como ejemplo, la gira dizque literaria de nuestro Alfaguaro (me encanta el uso del “dizque”; ¡gracias por tanto como nos has enseñado, Betty la Fea!); o el poético e idílico (no etílico) camino de Santiago de nuestra Manoli, o la rue Vanneau de Pasaventa, o sin ir más lejos nuestro propio Lokunowo (léase Banjul) con sus carreteras más que secundarias y sus inmensos termiteros que evocan la penúltima novela de nuestro laureado. Y así un largo etcétera.
¿Y qué nos encontramos de regreso al hogar? Parece que no habíamos cerrado bien los grifos de las letras y éstas han seguido fluyendo a su antojo en nuestra ausencia, de modo que nada más pisar tierras hispanas, sin darnos tiempo siquiera de besar el suelo como el Papa, vemos las librerías inundadas de novedades editoriales que urge leer si no quieres que te tachen de paleto, iletrado o cualquiera de esos bonitos calificativos: nuestra Madre Fundadora ya tiene a su bebé en el mercado (lo podemos encontrar en 80Mundos); Alfaguaro, siempre excesivo en sus manifestaciones (es lo que tiene Caravaca...), ha empapelado con sus fotos la Fnac y con sus libros ha formado torres que superan en altura las del último de Almudena Grandes (y eso que Corazón helado es mucho más gordo), e incluso hay quien se ha comprado Mira si yo te querré en un quiosco de un aeropuerto, en lugar de agenciarse el Cosmopolitan o el Elle con las fotos de Elsa Pataki. A algunos nos ha pillado este tsunami literario sin haber siquiera conseguido encontrar las dichosas Carreteras secundarias en las librerías, así que ya me diréis cómo vamos a ir a la tertulia sin haberlo leído (¿vale con ver la peli?).
Por cierto, ¿qué os parece la foto de la solapa que ha elegido la editorial para que el mundo mundial conozca la cara de nuestro Alfaguaro? Ya te advertí repetidas veces, querido compañero, que el cuello cisne no te hace justicia. Si me hubieras hecho caso...
Me despido recordando nuestras próximas citas: martes 17 vuelta al cole, miércoles 25 tertulia, jueves 26 presentación de Mira... en la Fnac, 8 de mayo presentación de El color... en 80Mundos.
RECORDATORIO MÁS O MENOS IMPORTANTE: a ver si nos vamos acostumbrando a escribir comentarios SOLAMENTE en la última entrada publicada, y no en todas aquellas que nos vengan en gana, que luego el lío para encontrar los últimos comentarios es bestial.

Cafeteras perdularias

Últimas noticias desde Berlín.

Os preguntaréis el porqué de un título tan absurdo; yo también, pero ya que este blog se nos está yendo continuamente de las manos, por las ramas y por los cerros de Úbeda, y recordemos que empezó siendo (y algún día volverá a serlo) un complemento a la tertulia literaria, no está de más recordar -aunque sea con ese bonito juego de palabras- el título del próximo libro que toca "tertuliar".

Hoy sí que estamos a una hora decente en el albergue, después de recorrer Berlín de cabo a rabo (con perdón) y puedo colgar algunas instantáneas de estos dos últimos días. La primera se trata de un momento de euforia más o menos etílica que tuvo lugar anoche en un centro alternativo de arte y copichuelas, el Tacheless, en el que los niños disfrutaron como lo que son bailando la Macarena (si hacéis un zoom descubriréis, como en "dónde está Wally", a cierta catedrática haciendo honor al título de esta entrada, y no lo digo por lo de la cafetera). Las otras son dos fotos del grupo en la Hauptbahnhof -estación central- y en la puerta del Reichstag, después de hora y media larga de cola para subir a la cúpula; a mí me vino de perlas la espera para explicarle a todo aquel que me quiso escuchar (léase mis trillizas, que son las únicas sobre las que ejerzo cierta autoridad porque les pongo notas cada evaluación) el uso del dativo en alemán, tema ameno a la par que instructivo donde los haya. La última es nuestra amada Nefertiti (Nofrotete por estos lares, mira tú que gracia) que ahora luce sus encantos en el Altes Museum, que no es que sea alto, sino antiguo, y antes estaba en el museo egipcio, donde destacaba más a juicio de nuestra filósofa y mío.

No me extiendo más porque preveo dificultades técnicas a la hora de colgar las fotos en este superminiordenador, cuyo teclado es tan exiguo que mis zarpas pulsan tres teclas al tiempo cada vez que intento ir un poco deprisa.

Apergaminad@s

Queridos tertuliantes y demás lectores: hacemos un alto en nuestra apretada agenda viajera para dedicaros unos minutos entre visita y visita museística. Estamos en el "hostel" reponiéndonos para la salida nocturna (que los adolescentes no perdonan ni una) después de patearnos el "alles Berlin" desde las 10 de la mañana. La visita nos la ha guiado una chica de Barcelona, sorprendentemente parecida a Teresa Mas, y nos ha fascinado no tanto por lo que nos ha explicado, que era muy interesante, como por lo bien que ha sabido mantener la atención de nuestros "seventeen", cosa que a nosotros nos cuesta horrores en circunstancias normales, no digamos ya fuera del aula.

En realidad este mensaje no es más que una burda excusa para poneros los dientes largos (y que ninguna castellano-manchega se dé por aludida) colgando unas fotos de la jornada. Como veréis, la descripción que os hacíamos de la habitación no era para nada exagerada: juzgad vosotros mismos a la vista de los cuerpos celestes que os adjuntamos.

Lo demás son escenas de la visita de hoy: la Branderburger Tor, el Pergamonmuseum, etc. Tenemos otras mucho más bonitas, pero tampoco es cuestión de atosigaros a base de imágenes.

Viele Grüsse aus Berlin.